The Gloria in Excelsis (Part Three)
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Thomas Cole, The Angel Appearing to the Shepherds, 1834Lost in Translation
#101Last week we examined the opening words of the Gloria in excelsis,
“Glory to...
Kwasniewski: en torno a la belleza
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*Nota de Beatrice:* agradecemos nuevamente al Profesor Augusto Merino la
traducción de esta interesante entrevista a Peter Kwasniewski sobre la
belleza y...
Lo que los muchos se niegan a ver
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*El siguiente artículo fue publicado en *The Times* de Londres el 17 de
julio. El autor es un periodista típico: progre, no-religioso y encolumnado
en...
LA NOBLE SENCILLEZ DE LA LITURGIA
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Iglesia Natividad de María de Ichuac
(Chiloé-Chile 1880)
Patrimonio mundial de UNESCO
Publico en español el apartado IV del artículo de don Enrico Finott...
¿Sinodálico?
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No soy *sinodálico* porque soy católico, y lo *sinodalical* no es católico
cabal. Antaño hubo sínodos, pero de otra especie, con otras intenciones,
motiv...
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“Una buena penitencia cuaresmal...luchar contra el mosquito del dengue”,
Mons. Orlando Brandes, arzobispo de Aparecida Del mismo creador de “el
dragón del ...
TOGLIAMOGLI IL GIOCATTOLO (…E IL FIASCO)
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“Noi lanciamo la campagna ‘liberi di partire – liberi di restare’ con 30
milioni dall’otto per mille di aiuti concreti!” così tuona Mons. Galantino,
il pri...
«Confesando» a su marido.
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Fray Rabieta tenía experiencia en el confesionario, pero la mujer que se
acercó a confesarse lo tomó enteramente por sorpresa. Sería de unos
cuarenta y pic...
Oh Jesús, Pontífice Eterno, Buen Pastor, Fuente de vida, que por singular generosidad de tu dulcísimo Corazón nos has dado nuestros sacerdotes para que podamos cumplir plenamente los designios de santificación que tu gracia inspira en nuestras almas; te suplicamos: ven y ayúdalos con tu asistencia misericordiosa. Sé en ellos, oh Jesús, fe viva en sus obras, esperanza inquebrantable en las pruebas, caridad ardiente en sus propósitos. Que tu palabra, rayo de la eterna Sabiduría, sea, por la constante meditación, el alimento diario de su vida interior. Que el ejemplo de tu vida y Pasión se renueve en su conducta y en sus sufrimientos para enseñanza nuestra, y alivio y sostén en nuestras penas. Concédeles, oh Señor, desprendimiento de todo interés terreno y que sólo busquen tu mayor gloria. Concédeles ser fieles a sus obligaciones con pura conciencia hasta el postrer aliento. Y cuando con la muerte del cuerpo entreguen en tus manos la tarea bien cumplida, dales, Jesús, Tú que fuiste su Maestro en la tierra, la recompensa eterna: la corona de justicia en el esplendor de los santos. Amén. (S.S. Pio XII)
S.S. Francisco PP
Oremus pro pontifice nostro Francisco: Dominus conservet eum, et vivificet eum, et beatum faciat eum in terra, et non tradat eum in animam inimicorum eius.